Ismael Serrano: incuestionable
 
 Concierto: Ismael Serrano. BarnaSants
Lugar: Teatre Joventut
Fecha: 2 y 3 de febrero de 2008
Parece que la voz monótona de Ismael Serrano no es inconveniente para que llene sin dificultad un teatro durante dos días consecutivos. Por algo será, digo yo.
Al que no se sepa las letras de sus canciones muy fácilmente terminará derribado en la butaca durmiendo a pierna suelta. Es verdad que eso es algo que les sucede a muchos artistas, aunque no a todos.
Las letras tienen su importancia en la música de Ismael pero los pocos registros de su voz hacen que a los neófitos les suene todo igual. Pero aquí no vamos aquí a quitarle mérito. Cada vez está más suelto, más seguro, más comunicativo, mejor. El público que tiene le sigue con fervor y el éxito de sus conciertos en Barcelona así lo corrobora. Fueron 3 horas de música y canciones en la que salió hasta 5 veces más al escenario después de haberse retirado. Lo cierto es que la gente lo pasó bien y él pareció sentirse cómodo también.
La representación de un pueblecito costero en el cono sur, los vestuarios marineros y el ambiente estuvo bastante logrado. Es verdad que dos de los músicos parecían enmorcillados dentro de aquellas dos camisetas tres tallas más pequeñas de lo que necesitaban. Sus conversaciones (que pretendían ser improvisadas) con Javier Bergia (a las percusiones) dieron también un tono simpaticote y festivo que no estuvo nada mal.
El resto es previsible… canciones bien conocidas, canciones tarareadas, canciones seguidas con palmas, ovaciones, gritos, gente de pie y Ismael que parece que no se va a ir nunca mas. En fin, un éxito.
Aún no he descubierto cual es el secreto de Serrano. Más allá de “Papá cuéntame otra vez”, el madrileño es un excelente comunicador. “Me gusta más lo que dice entre canción y canción que las propias canciones” me decía el compañero de mi lado. Y es que es imaginativo, tiene toques simpáticos y no parece distanciarse del público en absoluto, de manera que parece que Ismael sea como de la casa de cada uno y ese es un mérito innegable.
¿Qué papel juega entre los antiguos cantautores de siempre y los nuevos tiempos?. Pues me temo que esa pregunta la dejaré abierta para que alguien la conteste. Yo aún no tengo la respuesta.
Miguel Poveda hizo suyo el Gran Teatre del Liceu de Barcelona —uno de los grandes Teatros de la Ópera del mundo— en su concierto Distinto del 15 de Octubre, en el marco de la edición de 2025 del "Festival Jazz Barcelona".
El músico argentino Milo J lanza La vida era más corta, un álbum doble donde se cruzan el folklore argentino y los sonidos urbanos contemporáneos, en una obra que reúne a varias generaciones y cuenta con colaboraciones destacadas como las de Mercedes Sosa y Silvio Rodríguez.
Tras más de quince años de amistad y colaboraciones esporádicas, la actriz y cantante española Leonor Watling y el músico y productor estadounidense Leo Sidran publican Leo & Leo, un álbum conjunto disponible en plataformas digitales, CD y vinilo. El proyecto, con colaboraciones de Jorge Drexler, Kevin Johansen y Javi Peña, se acompaña de una gira internacional junto a The Groovy French Band.
El músico y compositor venezolano Henry Martínez murió este 2 de octubre, según informó su familia a través de un comunicado en redes sociales. Autor de más de 200 canciones, su obra fue interpretada por voces como Pablo Milanés, Martirio, Marc Anthony, Jerry Rivera, María Teresa Chacín, Cecilia Todd y Gualberto Ibarreto.
En un Palau Sant Jordi abarrotado, Joaquín Sabina se despidió de Barcelona con un concierto que fue al mismo tiempo un inventario de vida y un abrazo multitudinario a través de veintidós canciones que, tras más de medio siglo de carrera, ya no le pertenecen solo a él.