Para él no hay consigna si no es su consigna
Tras el Congreso Cultural de 1968, el ”quinquenio gris” intentó imponer la estética realista-socialista, con fuertes tintes propagandistas, en la todo movimiento cultural, marginando así a la nueva poesía trovadoresca, que se caracterizaba justamente por una amplísima temática expresada con un lenguaje libre y original.
Hoy parecen incomprensibles, hasta inconcebibles, las actitudes burocráticas hacia los nuevos creadores que cultivaban los ”seres-gaveta” de la cultura oficial. Los motivos para ser ignorados –o prohibidos–, por el Instituto Cubano de Radiofusión, podían ser tan irrisorios como las vestimentas informales de Noel, el exuberante pelo de Pablo, o la tímida desaprobación de los Beatles por parte de Silvio.
Esa espantosa mojigatería proveniente de la vieja sociedad, cruzada con cierta paranoia política, privaba a los trovadores toda posibilidad de ser difundidos a través de la radio o la televisión. Pero su prohibición en los medios masivos sólo aumentaba el interés, y la juventud concurría de modo caótico a las escasas actuaciones del grupo.
El gran deshielo se produjo cuando a fines de 1972 se creó el Movimiento de la Nueva Trova (MNT), con el apoyo de la Unión de Juventudes Comunistas. Entonces organizados en su propio organismo ”burocrático” se pudo constatar que esos temibles jóvenes eran realmente artistas revolucionarios, bastante disciplinados, conscientes de su historia y comprometidos con la lucha omnipresente de su pueblo. Fue, más que un problema de confrontación politica, un desacuerdo de conceptos estéticos, no exento del habitual desentendimiento generacional.
La cantautora mexicana Natalia Lafourcade actuó en solitario ayer domingo en el Liceu de Barcelona en el marco del Suite Festival, en un concierto cargado de emoción radical, depuración estilística, mestizaje sonoro, dramaturgia íntima y canción de autor en estado puro. Sílvia Pérez Cruz fue su invitada en sensible abrazo musical.
El 22 de julio, más de una docena de artistas se reunirán en Barcelona para rendir tributo a Dioptria, la obra más emblemática de Pau Riba y una de las más referenciales para la Nova Canço. Con la implicación de sus hijos; De Mortimers, la banda que lo acompaño los últimos 20; y nombres como Maria del Mar Bonet, Roger Mas, Pascal Comelade, Oriol Tramvia o Rita Payés; el concierto se plantea como una celebración única de su legado.
La cantante brasileña Vanessa de María regresa a la escena musical tras una pausa de 15 años con el proyecto Maestros, un disco dividido en dos volúmenes en el que rinde homenaje a las voces que marcaron su infancia y formación. El álbum cuenta con colaboraciones de artistas fundamentales de la canción latinoamericana como Silvio Rodríguez, Víctor Heredia, León Gieco, Teresa Parodi o Quilapayún.
El trovador cubano Silvio Rodríguez dará inicio a su próxima gira latinoamericana con una presentación pública y gratuita en la escalinata de la Universidad de La Habana, el 19 de septiembre a las 19:00. El histórico enclave volverá a convertirse en escenario de la Nueva Trova, en un evento que marcará el punto de partida de una serie de conciertos por cinco países de América del Sur.
El grupo chileno Estravagarios, heredero directo del legado musical de Quilapayún, lanza en formato físico (Digipack) el álbum Aquí estamos, esta vez bajo el título Estravagarios; Nous voici, 60 ans de ré-évolutions, una edición francesa que conmemora seis décadas de historia artística ininterrumpida.