100.000 espectadores
El Mercat de Música Viva de Vic cierra sus puertas con un notable incremento de público
La organización destaca el incremento de público con respecto a ediciones anteriores, aunque el número de profesionales ha descendido con respecto al año anterior.
La organización destaca el incremento de público con respecto a ediciones anteriores, aunque el número de profesionales ha descendido con respecto al año anterior.
El Mercat de Música Viva de Vic cerró ayer sus puertas con total satisfacción por parte de sus responsables.
Popularmente se han alcanzado los 100.000 espectadores, lo cual es un récord para una ciudad de menos de 40.000 habitantes. Se han registrado llenos espectaculares en la mayoría de los conciertos, incluso en los de pago.
Artísticamente ha sido un Mercat impecable. Ninguna propuesta ha decepcionado. Ni los más de 70 conciertos oficiales distribuidos entre ocho escenarios distintos, ni los más de 30 del InVicTro —conciertos de valores emergentes— ni los showcase de los dos escenarios del Pabellón comercial, ni tan siquiera las decenas de conciertos espontáneos que se suceden en las calles de Vic.
Comercialmente no hay indicadores objetivos. En el Pabellón comercial se trabaja mucho, pero —a pesar de que el número de compradores está equilibrado con el de vendedores— la sensación es que se vende más que se compra. Es cierto que la mayoría de contratos se formalizan en los días posteriores al mercado, pero de entrada —la crisis es la crisis— este año se han acreditado menos profesionales que el año anterior.
Para el año que viene los objetivos ya están fijados: una mayor internacionalización —en términos de importación y exportación de la música—, el trabajo en red y colaboración con otros festivales y ferias para hacer nuevas producciones impulsadas por el Mercat y el relanzamiento de la industria en el nuevo contexto de mercado. A todo esto, la aportación del Ayuntamiento de cara a la edición 2010, con el nuevo Auditori de Vic (una sala de 800 localidades y dos salas más) debe permitir hacer un nuevo dibujo del Mercado y acoger propuestas de gran formato y proyección en las mejores condiciones técnicas y de exhibición.
A tenor de los hechos y las cifras, es indudable que este Mercat ha sido impecable tanto organizativa como artísticamente. Pero como en cualquier mercado no basta con que las manzanas, los tomates y el pescado estén sanos, frescos y bien expuestos. Hay que venderlos.
La cantautora mexicana Natalia Lafourcade actuó en solitario ayer domingo en el Liceu de Barcelona en el marco del Suite Festival, en un concierto cargado de emoción radical, depuración estilística, mestizaje sonoro, dramaturgia íntima y canción de autor en estado puro. Sílvia Pérez Cruz fue su invitada en sensible abrazo musical.
El 22 de julio, más de una docena de artistas se reunirán en Barcelona para rendir tributo a Dioptria, la obra más emblemática de Pau Riba y una de las más referenciales para la Nova Canço. Con la implicación de sus hijos; De Mortimers, la banda que lo acompaño los últimos 20; y nombres como Maria del Mar Bonet, Roger Mas, Pascal Comelade, Oriol Tramvia o Rita Payés; el concierto se plantea como una celebración única de su legado.
La cantante brasileña Vanessa de María regresa a la escena musical tras una pausa de 15 años con el proyecto Maestros, un disco dividido en dos volúmenes en el que rinde homenaje a las voces que marcaron su infancia y formación. El álbum cuenta con colaboraciones de artistas fundamentales de la canción latinoamericana como Silvio Rodríguez, Víctor Heredia, León Gieco, Teresa Parodi o Quilapayún.
El trovador cubano Silvio Rodríguez dará inicio a su próxima gira latinoamericana con una presentación pública y gratuita en la escalinata de la Universidad de La Habana, el 19 de septiembre a las 19:00. El histórico enclave volverá a convertirse en escenario de la Nueva Trova, en un evento que marcará el punto de partida de una serie de conciertos por cinco países de América del Sur.
El grupo chileno Estravagarios, heredero directo del legado musical de Quilapayún, lanza en formato físico (Digipack) el álbum Aquí estamos, esta vez bajo el título Estravagarios; Nous voici, 60 ans de ré-évolutions, una edición francesa que conmemora seis décadas de historia artística ininterrumpida.